
Ya pasó lo peor, parece que finalmente sólo queda disfrutar de la boda, la pareja ha puesto una dedicación asombrosa en que cada detalle esté en su lugar y cada persona sepa su papel para “el gran día”.
Dice una frase: “El secreto de una gran mentira está en los detalles”. Yo creo que el secreto de un gran “lo que sea” está en los detalles, es el relleno que le da cohesión a la escena completa. Si una pareja ha dedicado un tiempo muy valioso en cuidar los detalles me pregunto yo ¿Por qué no dedicar un tiempo a fotografiarlos?
Difícilmente nos encontraremos en un escenario con los detalles tan cuidados como una boda, es el lugar idóneo para cuidar cada listón, cada flor, cada prenda. Gracias a ese empeño y dedicación ese “evento” se transforma en un “gran evento”.
Los detalles son sumamente importantes y es muy valorado tener fotografías de ellos ya que con tanto trabajo y cariño hemos hecho parte de nuestra boda. Como fotógrafo de bodas creo que es sumamente importante empezar inmortalizando estos detalles lo más pronto que sea posible en algunos casos antes que sean alterados por los propios invitados y antes de ir corriendo tras el reloj para inmortalizar tantos momentos importantes.
En la fotografía de bodas se acostumbra hacer uso de un lente muy especial que es capaz de tomar fotografías a cosas muy pequeñas y mostrar todos sus atributos, este lente se llama “Macro” y nos permite acercarnos mucho a nuestro sujeto para crear imágenes fuera de serie que pertenecen a otro mundo: el mundo de lo más pequeño.
¿La fotografía de detalle termina ahí? Por supuesto que no, la fotografía de detalles no sólo es fotografiar lo más pequeño en imágenes increíbles como los anillos de matrimonio y compromiso rodeado de pétalos, es también darle lugar a todo aquello que con cariño hemos puesto como parte importante de nuestra boda y que sin este pequeño ejercicio quedará solo en la memoria de los novios.
Podría hacer una lista interminable de cada detalle que forma parte de una boda: los anillos, los zapatos, el vestido, el maquillaje, el tocado, los regalos, los dulces, los adornos, algo viejo, algo prestado, algo azul, las luces, los centros de mesa, las minutas, los pañuelos, los relojes, los colores, las corbatas, las mancuernas, las arras, el arroz…
…Es posible seguir con esta lista hasta el infinito porque no hay evento tan detallado como una boda. Estos detalles inmortalizados con imágenes impactantes y muy emocionales serán sin duda un regalo muy apreciado por los protagonistas: los novios.